Vino blanco

El vino blanco es un tipo de vino obtenido por la fermentación de mosto sin cascarillas ni semillas, elaborado a partir de variedades de uvas blancas  o de uvas negras de pulpa blanca. 

Al recibirse la uva, ésta forma una pasta que conserva los hollejos y raspones y que es trasladada a las jaulas para ser sometida a un proceso de separación de los mostos, por la gravedad o por un estrujado. Los mostos así obtenidos están provistos de numerosas materias sólidas en suspensión procedentes mayoritariamente de la uva. Mediante el desfangado se procede a su separación. Una vez obtenido el mosto, hemos de añadir anhídrido sulfuroso, que ejercerá una ación antimicrobiana frente a levaduras y bacterias. Los mostos limpios se trasiegan y se trasladan a depósitos de acero inoxidable para la fermentación. Con este proceso se consigue que tanto el desdoblamiento de los azúcares en alcohol como el desprendimiento de carbónico. Los vinos con una alta proporción de ácido málico, son sometidos a una segunda fermentación denominada maloláctica o maloalcohólica,el ácido málico se transforma en ácido láctico o en alcohol. 

 

Después de la fermentación, el vino es sometido a dos o tres trasiegos para eliminar los restos sólidos, después de los trasiegos todavía suelen quedar elementos sólidos en suspensión que podrían degenerar, afectando al aspecto del vino y confiriéndole olores y sabores desagradables. Para eliminar estas partículas se somete al vino a un proceso de clarificación, introduciendo unas sustancias que arrastran los restos sólidos y los depositan en el fondo del depósito. Después se procede a la filtración del vino. 

  

Entre los vinos blancos más destacados y reconocidos en nuestra tierra gallega, podemos encontrarnos a Crego e Monaguillo , Mar de Frades y a Condes de Albariño. No esperes más y anímate a probar nuestra selección de vinos blancos, no te defraudarán!